Después del conflicto nuclear en el sexto sello, hay 144.000 creyentes sellados (es decir, protegidos contra los daños) de todas las tribus de Israel.
Hitgalut (Apocalipsis) 7:1-8
1 Después de estas cosas, vi cuatro mensajeros [ángeles] de pie en los cuatro extremos de la tierra, sosteniendo los cuatro vientos de la tierra, para que el viento no sople sobre la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol.
2 Entonces vi a otro mensajero que subía del oriente y tenía el sello del Elohim viviente. Y clamó a gran voz a los cuatro mensajeros a quienes se les había permitido dañar la tierra y el mar,
3 diciendo: “No dañen la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos sellado a los siervos de nuestro Elohim en sus frentes”.
4 Y oí el número de los sellados. Ciento cuarenta y cuatro mil sellados de todas las tribus de los hijos de Israel:
5 de la tribu de Judá, doce mil sellados; de la tribu de Rubén, doce mil sellados; de la tribu de Gad, doce mil sellados;
6 de la tribu de Aser, doce mil sellados; de la tribu de Neftalí, doce mil sellados; de la tribu de Manasés, doce mil sellados;
7 de la tribu de Simeón, doce mil sellados; de la tribu de Leví, doce mil sellados; de la tribu de Isacar, doce mil sellados;
8 de la tribu de Zabulón doce mil sellados; de la tribu de José, doce mil sellados; de la tribu de Benjamín doce mil sellados.
Apocalipsis 9:4 nos dice que los 144.000 serán protegidos de los daños hasta la quinta trompeta (la mitad de la tribulación).
Hitgalut (Apocalipsis) 9:1-5
1 Entonces el quinto mensajero toco su trompeta: Y vi una estrella caer del cielo a la tierra. A él se le dio la llave del pozo del abismo.
2 Y abrió el pozo del abismo, y se levantó humo del pozo como el humo de un gran horno. Entonces el sol y el aire se oscurecieron por el humo del pozo.
3 Y del humo salieron langostas sobre la tierra. Y a ellas se les dio poder, como los escorpiones de la tierra tienen poder.
4 Se les ordenó que no dañaran la hierba de la tierra, ni ninguna cosa verde, ni ningún árbol, sino solo a aquellos hombres que no tienen el sello de Elohim en sus frentes.
5 Y no se les dio autoridad para matarlos, sino para atormentarlos durante cinco meses. Su tormento era como el tormento de un escorpión cuando golpea a un hombre.
Los 144.000 están ante el trono de Elohim en el cielo en la séptima trompeta, habiendo sido “redimidos de la tierra” (es decir, están muertos). Probablemente murieron durante la sexta trompeta (ya que fueron sellados para evitarles daños hasta la quinta trompeta).
Hitgalut (Apocalipsis) 14:1-5
1 Y miré, y he aquí un Cordero de pie en el Monte de Sion, y con Él ciento cuarenta y cuatro mil, que tenían el nombre de Su Padre escrito en sus frentes.
2 Y oí una voz del cielo, como el estruendo de muchas aguas, y como la voz de un gran trueno. Y oí el sonido de arpistas tocando sus arpas.
3 Y cantaron un cantico nuevo delante del trono, y delante de los cuatro seres vivientes y de los ancianos; y nadie podía aprender esa canción, excepto los ciento cuarenta y cuatro mil que fueron redimidos de la tierra.
4 Estos son los que no se contaminaron con mujeres, porque son vírgenes. Estos son los que siguen al Cordero a donde quiera que va. Estos fueron redimidos de entre los hombres, como primicias para Elohim y para el Cordero.
5 Y en sus bocas no se halló engaño, porque son sin mancha delante del trono de Elohim.
A algunos les gusta argumentar que el Monte Sion en el versículo 1 es el Monte Sion terrenal, pero esto no concuerda ya que en el versículo 3 cantan ante el trono de Yahweh y las cuatro criaturas vivientes (que solo están en el cielo). El versículo 4 también dice que son “redimidos de entre los hombres” y que son “primicias para Elohim”, lo que significa que son mártires.
Más tarde veremos que durante el regreso de Yeshúa a la Tierra, en la Batalla de Armagedón, probablemente los 144.000 sellados vendrán con Él. Es probable que sean el “ejército en el cielo” que lo sigue en caballos blancos (versículo 14).
Hitgalut (Apocalipsis) 19:11-16
11 Y vi el cielo abierto, y he aquí un caballo blanco. Y el que lo montaba se llamaba “Fiel y Verdadero”, y en justicia juzga y hace la guerra.
12 Sus ojos como llama de fuego, y sobre Su cabeza muchas diademas. Y tenía un nombre escrito que nadie conocía excepto Él mismo.
13 Estaba vestido con una túnica teñida en sangre, y su nombre es llamado “La Palabra de Elohim”.
14 Y los ejércitos en el cielo, vestidos de lino fino, blanco y limpio, lo seguían en caballos blancos.
15 De Su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones. Y Él mismo las gobernará con vara de hierro. Él mismo pisa el lagar del vino de la ira del Todopoderoso Elohim.
16 Y tiene en Su manto y en Su estandarte un nombre escrito: REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES.
Cuando los 144.000 sellados se enumeran por primera vez en Apocalipsis 7 (arriba), tanto Manasés como Yosef (José) son nombrados, mientras que Dan y Efraim no lo son. Como Yosef está compuesto tanto por Manasés como por Efraim, Efraim aparece una vez en la lista, mientras que Manasés es mencionado efectivamente dos veces. Para entender el simbolismo aquí, recordemos que cuando las diez tribus del norte de Efraim se separaron del reino del sur de Judá, su nuevo rey, Jeroboam, estableció becerros de oro en Dan y Beth-El (en las fronteras de Dan y Efraim, respectivamente).
Melajim Alef (1 Reyes) 12:28-31
28 Por lo cual el rey pidió consejo, e hizo dos becerros de oro y dijo al pueblo: “Es demasiado que vayáis a Jerusalem. ¡Aquí están tus Elohim, Oh Israel, que te hicieron subir de la tierra de Egipto!”
29 Y puso uno en Betel [en el territorio de Efraim], y el otro lo puso en Dan [en el territorio de Dan].
30 Y esto se convirtió en causa de pecado, porque el pueblo iba hasta Dan a adorar.
31 He hizo santuarios en los lugares altos, e hizo sacerdotes de entre el pueblo, que no eran de los hijos de Leví.
Si recordamos, la idolatría es adulterio espiritual, entonces Apocalipsis está diciendo que cualquiera que practique la idolatría (y particularmente el tipo de idolatría de Jeroboam) no es una virgen espiritual (Apocalipsis 14:5), y por lo tanto no será incluida dentro de los 144.000 sellados.
¿Cuál es la idolatría que cometió Jeroboam? En Israel Nazareno, mostramos cómo Jeroboam cambió los días de fiesta en un mes y estableció la adoración de ídolos en lugares distintos de Jerusalem. También estableció un sacerdocio que no era de los hijos de Leví. Este fue un presagio profético de la iglesia Cristiana, en la cual los días de las fiestas del séptimo mes fueron cambiados (de la fiesta de Tabernáculos a la Navidad), Jerusalem es reemplazada por Roma, y un falso sacerdocio Romano reemplazó el sacerdocio Levítico y el sacerdocio del orden de Melquisedec.
Apocalipsis 7 también habla de una gran multitud vestida de blanco que está delante del trono de Elohim (versículo 9). El versículo 14 dice que estos “saldrán de la gran tribulación”, lo que significa que ellos morirán durante la tribulación, y van a estar con Elohim.
Hitgalut (Apocalipsis) 7:9-17
9 Después de estas cosas miré, y he aquí, una gran multitud que nadie podía contar, de todas las naciones, tribus, pueblos y lenguas, de pie delante del Trono y delante del Cordero, vestidos con túnicas blancas y con palmas en sus manos,
10 clamando a gran voz, diciendo: “¡La salvación pertenece a nuestro Elohim que está sentado en el trono, y al Cordero!”
11 Todos los mensajeros estaban alrededor del trono y los ancianos y los cuatro seres vivientes, y se postraron sobre sus rostros delante del trono y adoraron a Elohim,
12 diciendo: “¡Amen!, la bendición y la gloria y la sabiduría y la gratitud y la honra y el poder y la fortaleza, sean a nuestro Elohim por los siglos de los siglos”
13 Entonces uno de los ancianos habló, y me dijo: ¿Quiénes son estos que están vestidos de túnicas blancas, y de dónde vienen?
14 Y le dije: “Adón, tú sabes”. Entonces él me dijo: “Estos son los que han salido de la gran tribulación, y han lavado sus vestiduras y las han blanqueado en la sangre del Cordero”.
15 “Por esto están delante del trono de Elohim, y le sirven día y noche en Su templo. Y el que está sentado en el trono morará entre ellos.
16 Ya no tendrán hambre ni sed; el sol no los alcanzará, ni ningún calor;
17 porque el Cordero que está en medio del trono los pastoreará y los conducirá a fuentes de aguas vivas. Y Elohim enjugará todas las lágrimas de sus ojos”.
A medida que avanzamos hacia el final de los tiempos, debemos mirar la vida y la muerte desde la perspectiva de Yahweh. Este mundo no es nuestro hogar. Por lo tanto, si somos perseguidos, no debemos temer.
Luqa (Lucas) 12: 4-5
4 “Y les digo, amigos Míos, no tengan miedo de los que matan el cuerpo, porque después de eso no pueden hacer nada más.
5 Pero Yo les mostraré a quién deben temer: teman a aquel que, después de haber matado, tiene poder para echar al infierno; sí, les digo, ¡teman a Él!
Por supuesto, queremos evitar la persecución (y lo abordaremos más adelante en este estudio), pero si entramos en persecución, debemos pedirle a Yahweh que nos ayude a ser fieles a Él, para que podamos recibir la corona de la vida eterna.
Hitgalut (Apocalipsis) 2:10
10 “No temas nada de las cosas que estás a punto de sufrir. De hecho, el diablo arrojará a algunos de ustedes en la prisión, para que sean probados, y tendrán tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, y Yo te daré la corona de la vida”.