Mientras los sellos se van liberando durante cientos de años, la tribulación demora aproximadamente siete años y las copas de la ira se derraman en aproximadamente 30 días. Podríamos visualizar un espectáculo de fuegos artificiales que comienza lentamente, se va desarrollando y finalmente alcanza su punto máximo en una gran final al término de este. También podemos aplicar la parábola de la novia embarazada (Israel), que soporta una carga creciente durante muchos meses. A medida que se acerca el momento de dar a luz, comienza a sufrir dolores de parto (contracciones). Cerca del final ella grita de dolor (siete truenos). Entonces su agua se rompe (copas). Al final, su dolor se vuelve agotador (incluso cegador) justo antes de dar a luz a su hijo varón (Israel Redimido), y el reino de Elohim se restaura.
En Apocalipsis 15 regresamos a la historia lineal, luego del desarrollo de los eventos insertados (o entre paréntesis) del capítulo 14. Primero nos encontramos con 7 mensajeros (ángeles) que derramarán las últimas 7 plagas sobre la tierra para completar la ira de Elohim. También se nos recuerda que es justo que Yahweh derrame estas copas de la ira y destrucción sobre Babilonia.
Hitgalut (Apocalipsis) 15:1-4
1 Entonces, vi otra señal en el cielo, grande y maravillosa: siete mensajeros que tenían las siete plagas postreras, porque en ellos la ira de Elohim estará completa.
2 Y vi algo como un mar de vidrio mezclado con fuego, y los que tienen la victoria sobre la bestia, sobre su imagen y sobre su marca y sobre el número de su nombre, de pie sobre el mar de vidrio, con las arpas de Elohim.
3 Cantan el canto de Moshé, siervo de Elohim, y el canto del Cordero, diciendo:
“¡Grandes y maravillosas son Tus obras, Yahweh Elohim Todopoderoso! ¡Justos y verdaderos son Tus caminos, oh Rey de los apartados [santos]!
4 ¿Quién no te temerá, oh Yahweh, y glorificará Tu nombre? Porque solo Tú eres Apartado. Porque todas las naciones vendrán y adorarán delante de Ti, porque Tus juicios se han manifestado”.
El Armagedón ocurre 45 días después de que las copas se hayan derramado. En capítulos posteriores, mostraremos que el Armagedón es la fiesta de bodas. Cuando Efraim recuerda que ella es la novia, entonces querrá volver a casa en la tierra de Yahweh, y establecer Su reino. Esto conducirá a la cosecha, y luego al milenio. Es durante el milenio que el versículo 4 se cumple, y todas las naciones vienen a adorar delante de Yahweh. Esto se relaciona con Zacarías 14, donde se nos dice que todas las naciones que vinieron contra Jerusalem (es decir, las naciones Islámicas) tendrán que ir a Jerusalem para adorar a Yahweh y celebrar la fiesta de los Tabernáculos, o no lloverá sobre su tierra. (Nota: en el versículo 17, la palabra tierra es la palabra Hebrea aretz (ארץ). Si bien esta palabra puede significar tierra, en este contexto se refiere a la tierra del Medio Oriente).
Zacarías (Zacarías) 14:16-17
16 Y acontecerá que todos los que queden de todas las naciones que vinieron contra Jerusalem, subirán de año en año para adorar al Rey, Yahweh de los ejércitos, y a celebrar la Fiesta de los Tabernáculos.
17 Y sucederá que cualquiera de las familias de la tierra [ארץ] que no suban a Jerusalem para adorar al Rey, Yahweh de los ejércitos, no habrá lluvia sobre ellos.
Lo siguiente es cuando los 7 mensajeros reciben las 7 copas de la ira, y desde este momento nadie puede entrar al templo celestial hasta que estas copas de juicio (y la ira) hayan sido derramadas.
Hitgalut (Apocalipsis) 15: 5-8
5 Después de estas cosas miré, y he aquí, se abrió el templo del tabernáculo del testimonio en el cielo.
6 Y del templo salieron los siete mensajeros que tenían las siete plagas, vestidos de lino puro y resplandeciente, y ceñidos alrededor del pecho con cintos de oro.
7 Entonces, una de las cuatro criaturas dio a los siete mensajeros las siete copas de oro de la ira de Elohim, que vive por los siglos de los siglos.
8 El templo se llenó del humo de la gloria de Elohim y de Su poder, y nadie pudo entrar al templo hasta que las siete plagas de los siete mensajeros fueron consumadas.
Aun cuando los mandamientos para abrir los sellos y sonar las trompetas se dieron uno a la vez, aquí los 7 mensajeros se les dice que derramen las copas en rápida sucesión o también es posible que todas a la vez.
Hitgalut (Apocalipsis) 16:1-3
1 Entonces oí una gran voz desde el templo que decía a los siete mensajeros: “Vayan y derramen
las copas de la ira de Elohim sobre la tierra”.
2 Y fue el primero, y derramó su copa sobre la tierra, y vino una úlcera fétida y repugnante sobre los hombres que tenían la marca de la bestia, y sobre los que adoraban su imagen.
3 Entonces el segundo mensajero [ángel] derramó su copa sobre el mar, y se volvió como sangre de un hombre muerto; y toda criatura viviente en el mar murió.
Durante las trompetas, la destrucción se produjo por tercios (es decir, en una gran minoría). Sin embargo, aquí la devastación es casi total. Por ejemplo, cuando se derrama la primera copa, todos los que han tomado la marca de la bestia y adoran a su imagen reciben llagas inmundas y repugnantes. Cuando se vierte la segunda copa, el mar (Mediterráneo) se convierte en sangre, y muere toda criatura viviente en el mar.
Cuando se vierte la tercera copa, los ríos y manantiales de agua se convierten en sangre. Esta es probablemente una referencia simbólica a un evento espiritual. Dado que el agua representa el Espíritu (y, por lo tanto, la doctrina), es posible que los leales a Babilonia beban sangre espiritual, tal como Babilonia bebió de una copa llena de la sangre de los apartados (Apocalipsis 17:6). En otras palabras, debido a que se rehúsan a regresar, continúan siendo más como su amante, Babilonia.
Hitgalut (Apocalipsis) 16: 4-7
4 Y el tercer mensajero derramó su copa sobre los ríos y las fuentes de agua, y se convirtieron en sangre.
5 Y oí al mensajero de las aguas decir:
“Eres justo, oh Yahweh, Aquel que es y que era y que será, porque has juzgado estas cosas.
6 Porque derramaron la sangre de los apartados y de los profetas, y les diste a beber sangre. Pues se lo merecen”.
7 Y oí a otro del altar que decía de la misma manera: “Yahweh Elohim Todopoderoso, verdadero y justo son Tus juicios”.
Luego, la cuarta copa se derrama sobre el sol, y al mensajero se le da el poder de quemar a los hombres con fuego. Sin embargo, aquellos que aman a Babilonia todavía se niegan a arrepentirse o darle la gloria a Elohim.
Hitgalut (Apocalipsis) 16:8-9
8 Entonces el cuarto mensajero derramó su copa sobre el sol, y se le dio poder para quemar a los hombres con fuego.
9 Y los hombres se quemaron con el gran calor, y blasfemaron el nombre de Elohim que tiene poder sobre estas plagas; y ellos no se arrepintieron para darle gloria.
Esto puede corresponder a lo que dice Isaías 30:26, donde la luz del sol (el Espíritu de Yeshúa) será siete veces mayor, y la luz de la luna (Torá) será como la luz del sol anterior. Esto será una bendición para los leales a Elohim, ya que Su reino se restablece. Sin embargo, será doloroso (e incluso mortal) para aquellos que permanecen leales a Babilonia.
Yeshayahu (Isaías) 30:26
26 Además la luz de la luna será como la luz del sol, y la luz del sol será siete veces mayor, como la luz de siete días, en el día en que Yahweh vende la quebradura de Su pueblo y cure la llaga de su herida.
Cuando se vierte la quinta copa, el reino de la bestia (es decir, el sistema mundial único y la religión universal) se llena de oscuridad, y los hombres se muerden la lengua por el dolor.
Hitgalut (Apocalipsis) 16:10-11
10 Entonces el quinto mensajero derramó su copa sobre el trono de la bestia, y su reino se llenó de oscuridad; y se mordían la lengua a causa del dolor.
11 Ellos blasfemaron contra el Elohim del cielo por sus dolores y sus llagas, y no se arrepintieron de sus obras.
Cuando se vierte la sexta copa, tres espíritus inmundos como las ranas salen de las bocas del dragón (Satanás), la bestia (Babilonia/Roma) y el falso profeta (Mahoma). Porque un espíritu inmundo para salir de la boca de Satanás significa que incluso él está poseído. Estos demonios luego comienzan a reunir al mundo entero (o quizás el mundo Islámico) para luchar en Armagedón, que tendrá lugar unos 45 días después.
Hitgalut (Apocalipsis) 16: 12-16
12 Entonces el sexto mensajero derramó su copa sobre el gran río Éufrates, y se secó su agua, para que se preparara el camino de los reyes del oriente.
13 Y vi salir tres espíritus inmundos, como ranas, de la boca del dragón, de la boca de la bestia y de la boca del falso profeta.
14 Porque son espíritus de demonios, que hacen señales, que salen a los reyes de la tierra y de todo el mundo, para congregarlos en la batalla de aquel gran día del Elohim Todopoderoso.
15 “He aquí, Yo vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela, y guarda sus vestiduras, para que no ande desnudo y vean su vergüenza”.
16 Y los reunieron en el lugar llamado en Hebreo, Har Meguido [Armagedón].
Cuando se vierte la séptima copa, hay un gran terremoto, mayor que cualquiera anterior. Esto representa el colapso total del orden social Babilónico que ha gobernado el mundo desde los días de Nimrod (Génesis 10:8-10). Cuando la tiranía Babilónica se venga abajo, cada isla (límite nacional) desaparecerá, y no se encontrará ninguna montaña (gobierno).
Hitgalut (Apocalipsis) 16:17-21
17 Entonces el séptimo mensajero derramó su copa en el aire, y salió una gran voz del templo del cielo, desde el trono, diciendo: ¡Hecho está!
18 Y hubo voces, truenos y relámpagos; y hubo un gran terremoto, un terremoto tan grande y poderoso como no había ocurrido desde que los hombres estuvieron en la tierra.
19 Y la gran ciudad fue dividida en tres partes, y las ciudades de las naciones cayeron. Y la gran Babilonia fue recordada delante de Elohim, para darle el cáliz del vino del furor de Su ira.
20 Entonces cada isla [frontera nacional] huyó, y las montañas [gobiernos] no se encontraron.
21 Y gran granizo cayó del cielo sobre los hombres, cada piedra de granizo como del peso de un talento. Y los hombres blasfemaron a Elohim por la plaga del granizo, ya que esa plaga era extremadamente grande.
Esto es también cuando la estatua en el sueño de Nabucodonosor se derrumba, y el reino de Elohim se restablece en su lugar.
Daniel 2: 44-45
44 “Y en los días de estos reyes, el Elohim del cielo establecerá un reino que nunca será destruido; y el reino no se dejará a otras personas; romperá en pedazos y consumirá todos estos reinos, y permanecerá para siempre.
45 En cuanto a la piedra que viste, que fue cortada de la montaña sin manos, y que partió en pedazos el hierro, el bronce, la arcilla, la plata y el oro. El gran Elohim ha dado a conocer al rey lo que ha de suceder en el futuro. El sueño es cierto y su interpretación es fiel”.
La gran ciudad en el versículo 19 probablemente sea Roma. Esta puede ser la razón por la cual las ciudades de las naciones (es decir, las capitales que se basan en un fundamento Babilónico) también caen en ese momento. Este será un momento de gran agitación. No habrá policías, ni militares, ni gobierno. Si bien debemos hacer todo lo posible para prepararnos para este día de forma natural, es mucho más importante prepararse espiritualmente, escuchando y obedeciendo la voz de Yahweh. Eso determinará quiénes son los Israelitas redimidos, y esta es la gente que Yahweh quiere traer de regreso a Su tierra. Yahweh no tiene ningún incentivo para proteger y salvar a aquellos que no obedecen.