En el estudio Israel Nazareno vimos que después del reinado del rey Salomón, la nación de Israel se dividió en dos partes. Las diez tribus del Norte fueron llamadas “la casa de Israel (o Efraim)”, mientras que las dos tribus del Sur fueron llamadas “la casa de Judá”. Ezequiel dijo que debido a la iniquidad de Efraim, este iría al cautiverio a Asiria durante 390 años.
Yehezqel (Ezequiel) 4: 4-5
4 “Acuéstate también sobre tu lado izquierdo, y pon sobre ti la iniquidad de la casa de Israel. Según el número de días que duermas sobre él, llevarás su iniquidad.
5 Porque he puesto sobre ti los años de su iniquidad, según el número de los días, trescientos noventa días; así llevarás la iniquidad de la casa de Israel”.
Sin embargo, al final de los 390 años, la casa del Norte de Israel no se arrepintió, por lo que el cautiverio Asirio se prolongó siete veces más, de acuerdo a Levíticos 26
Vayiqra (Levíticos) 26:18
18 “Y si después de todo esto aún no Me obedecen, los castigaré siete veces más por sus pecados”.
Si multiplicamos los 390 años de cautiverio de Efraim por 7, la nueva sentencia es aproximadamente 2730 años de cautiverio. Si agregamos esos 2730 años al tiempo de inicio del cautiverio (alrededor del año 732 a.C) obtenemos una nueva fecha para el término del cautiverio que es aproximadamente el año 1998 d.C. Por esto, no es una sorpresa que cerca de este tiempo el movimiento Efraimita comenzó a aparecer en la escena mundial.
Obtenemos un segundo testigo de la fecha de 1998 si utilizamos el principio en 2 Pedro 3: 8, que nos dice que un día profético puede ser igual a mil años terrestres.
Kefa Bet (2 Pedro) 3: 8
8 Pero, amados, no olviden esto, que con Yahweh un día son como mil años, y mil años como un día.
Oseas 6: 1-2 nos habla de un tiempo cuando después de unos dos días proféticos (o 2,000 años) la Casa del Norte de Israel regresará a Elohim, y será revivida como un pueblo.
Hoshea (Oseas) 6: 1-2
1 Vengan, regresemos a Yahweh; Porque Él nos desgarró, pero nos sanará; Él nos hirió, pero nos vendará.
2 Después de dos días nos revivirá; En el tercer día, Él nos levantará para que vivamos delante de Él.
Los historiadores no están de acuerdo con el año exacto del nacimiento de Yeshúa, pero la mayoría de los historiadores lo ubican entre el 0 al 4 a.C. Cuando sumamos los dos mil años al 0-4 a.C, nos resultan los años 1996-2000 d.C, que coincide con la estimación de Ezequiel 4 del año 1998.
Además, también nos ayudara saber que hay dos “Judá” en la profecía. En 2 Reyes 18:13 se nos dice que cuando el rey Asirio Senaquerib tomó cautivas a las diez tribus del Norte, también tomó todas las ciudades fortificadas (fortalezas militares) de Judá, y debido a esto, muchos Judíos también fueron enviados al cautiverio Asirio (junto con las diez tribus del Norte). Podríamos llamar a este grupo de Judíos como “Judíos de la diáspora Asiria” (para diferenciarlos de aquellos que no entraron en la Dispersión Asiria).
Melajim Bet (2 Reyes) 18:13
13 Y en el año catorce del rey Ezequías, Senaquerib, rey de Asiria, subió contra a todas las ciudades fortificadas de Judá y las tomó.
Luego, después de otros 136 años (alrededor del año 586 a.C.), la casa de Judá fue llevada cautiva por Babilonia, donde se produjeron grandes cambios en la fe Judía. Cuando Judá entró en Babilonia, tenía un sacerdocio Levítico, y cuando salió de Babilonia tenía un sacerdocio rabínico. Al contrario del orden Levítico (que entendía que su deber era enseñar la Torá de Yahweh), el orden rabínico enseñaba que Yahweh les había dado la autoridad para establecer su propia Torá en cada generación, aun cuando esto viola la Torá de Yahweh.
Devarim (Deuteronomio) 12:32
32 “Cuidarás de hacer todo lo que Yo te mando, no le añadirás ni le quitarás”.
Dado que los rabinos estaban desobedeciendo la Torá de Yahweh (y aun así llamando Torá a sus propias leyes), ¿qué debería hacer Yahweh con ellos? La Iglesia Romana (erróneamente) nos dice que Yahweh envió a Yeshúa para abolir la Torá y para reemplazar a los Judíos con la Iglesia Gentil. Sin embargo, como vimos en el estudio Israel Nazareno, Yeshúa no buscaba reemplazar a los Judíos o al Judaísmo. Más bien, Yeshúa buscaba reemplazar la orden rabínica por Su orden renovado de Melquisedec. Luego Él envió a Su renovado sacerdocio Melquisedeciano al mundo para encontrar y reunir a las ovejas perdidas de la casa de Israel (Efraim).
Mattityahu (Mateo) 15:24
24 Pero Él respondió y dijo: “No fui enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel”
El sacerdocio renovado de Yeshúa fue enviado a todas las naciones, para hacer discípulos y enseñarles a estos a obedecer todas las cosas que Yeshúa había ordenado.
Mattityahu (Mateo) 28: 19-20
19 “Vayan, pues, y hagan discípulos en todas las naciones, sumergiéndolos en Mi nombre*;
20 y enséñenles a guardar todas las cosas que les he mandado y, he aquí, yo estoy con ustedes por siempre, hasta el final de los tiempos”. Amén.
[*Para saber por qué nos sumergimos solo en el nombre de Yeshúa, vea “La Inmersión solo en el nombre de Yeshúa“, en Estudios Escriturales Nazarenos, Volumen Tres].
Y nosotros, cómo los discípulos de Yeshúa, no solo debemos hacer todo lo Él nos ordena, sino que también debemos imitarlo y enseñar a otros a hacer lo mismo.
Qorintim Alef (1 Corintios) 11: 1
1 Imítenme a mí, así como yo imito al Mesías.
Yojanán (Juan) nos dice que, si permanecemos en Yeshúa, entonces debemos caminar como Él caminó.
Yojanán Alef (1 Juan) 2: 6
6 El que dice que permanece en Él, también debe andar como Él anduvo.
Los Hebreos tienen la tradición de imitar a sus grandes hombres y “andar como Él anduvo” es un lenguaje Hebraico que significa que debemos practicar la misma fe que practicó Yeshúa (hasta el último detalle). Esto significa reconciliarse con Elohim al reconciliarse con la persona de Yeshúa. Al reconciliarnos con Él, nos reconciliamos con todos.
Qorintim Bet (2 Corintios) 5: 18-19
18 Ahora, todas las cosas son de Elohim, quien nos ha reconciliado consigo mismo a través de Yeshúa el Mesías, y nos ha dado el ministerio de la reconciliación,
19 es decir, que Elohim estaba en el Mesías reconciliando al mundo consigo mismo, no tomándoles en cuenta sus transgresiones, y nos ha confiado la palabra de reconciliación.
Para reconciliarnos con Yeshúa, y caminar como Él caminó, necesitamos darnos cuenta de que Yeshúa aún practicaba el Judaísmo. Hay muchos testigos de esto en todo el Pacto Renovado. Por ejemplo, en Marcos 11: 25-26, Yeshúa nos dice que cuando oramos, necesitamos perdonar las ofensas de los demás, para que también nosotros podamos recibir perdón.
Marqaus (Marcos) 11: 25-26
25 “Y cuando estén orando, perdonen, si quizás tienen algo en contra de alguien, para que Su Padre que está en los cielos les perdone a ustedes sus ofensas.
26 Pero si no perdonan, tampoco su Padre que está en los cielos perdonará sus ofensas”
Yeshúa está comentando sobre la Amidáh, o la oración permanente Judía, que forma una parte central de casi todos los servicios de adoración rituales Judíos. Hay una oración para el perdón en la Amidá, y aquí Yeshúa nos dice que, si queremos que Elohim nos perdone, también debemos perdonar a los demás.
La historia también nos dice que los Judíos, en el tiempo de Yeshúa, usaban tefilín (filacterias) y tzitzit (flecos). Debemos tener en cuenta que Yeshúa nunca dijo que no usáramos tefilín o tzitzit. Más bien, criticó a los que hacían correas especiales para sus tefilines (para ser vistos por los hombres), y también a los que alargaban su tzitzit para que se arrastraran en la tierra (como aún hoy lo hacen algunos hombres ortodoxos).
Mattityahu (Mateo) 23: 5
5 “Pero hacen todas sus obras para que los hombres los vean. Ellos ensanchan sus filacterias y alargan los flecos [es decir, los tzitzit] de sus mantos”.
Y si vamos a imitar el camino de Yeshúa como un medio de reconciliación, deberíamos darnos cuenta de que la costumbre de Yeshúa era ir a la sinagoga en Shabat.
Luqa (Lucas) 4:16
16 Entonces vino a Nazaret, donde se había criado. Y como era Su costumbre, entró en la sinagoga el Shabat y se levantó para leer.
En el Judaísmo se considera un honor presentarse ante la congregación y leer las Escrituras, y solo se invita a los que tienen buena reputación para hacerlo. Esto nos dice que Yeshúa era un asistente regular y respetado en Su sinagoga. Y si Yeshúa era un asistente regular respetado en Su sinagoga, este también debe ser nuestro ideal.
Algunas veces los Efraimitas desconfían del servicio de la sinagoga Judía, tal vez porque no pueden decir qué partes del Judaísmo aún mantienen el estilo de adoración de nuestros padres (que existía antes de Babilonia) y qué partes se crearon en Babilonia. Sin embargo, Shaul nos dice que el servicio de adoración (y el estilo de la sinagoga) fue una de las cosas que se le dio a Judá, para que ellos los guardaran mientras los Efraimitas estaban dispersos en las naciones.
Romim (Romanos) 9: 4-5
4 que son Israelitas, de quienes son la adopción, la gloria, los pactos, la legislación de la Torá, el servicio [de adoración] y las promesas;
5 de los cuales son los patriarcas y de los cuales, según la carne, vino el Mesías, quien es sobre todos, bendito sea Elohim por los siglos. Amén.
Al seguir la forma de adoración de Yeshúa, podemos hacer a un lado muchas de las corrupciones que dominan el Cristianismo y el Judaísmo rabínico. Pero ¿qué tipo de corrupciones son estas?
En el estudio Israel Nazareno, vimos que los discípulos continuaron ofreciendo sacrificios de animales durante todo el tiempo en que estuvo de pie el templo de Jerusalem. Sabemos esto porque, en Hechos 21, hay una conversación entre Yaakov (Santiago) y Shaul (Pablo) en la que Yaakov le dice a Shaul que pague por los 15 sacrificios de animales necesarios para separar los votos Nazareos por sí mismo y por otros cuatro hombres [que también terminaban sus votos]. Siendo cinco de estos sacrificios de animales por el pecado (Números 6:14). Al hacer esto, Yaakov dijo que “todos podrían enterarse” de que Shaul también caminaba de manera ordenada, guardando toda la Torá de Yahweh [y que no estaba enseñando en contra de ella].
Ma’asei (Hechos) 21: 23-24
23 “Por tanto, haz lo que te decimos: tenemos cuatro hombres que [también] han hecho un voto [Nazareo].
24 Tómalos y purifícate con ellos, y [tú] paga sus gastos para que se afeiten la cabeza, así todos sabrán que esas cosas de las que les informaron sobre ti [la enseñanza contra la Torá] no son ciertas, sino que tú también caminas ordenadamente y guardas la Torá”.
En el primer siglo hubo persecución. Si bien, a veces fue posible que los discípulos entraran al templo, en otras ocasiones no fue así. Según algunos informes, el apóstol Yaakov fue asesinado en el año 62 d.C cuando fue expulsado del templo, apedreado y luego murió con un madero [golpe en la cabeza].
Entonces, subieron y arrojaron al hombre justo, y se dijeron unos a otros: “Vamos y lancemos piedras a Jacobo el Justo”. Y comenzaron a apedrearlo, porque la caída no lo mató; pero se volvió, se arrodilló y dijo: “Te ruego, Señor Dios nuestro Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”. Y mientras lo estaban apedreando uno de los sacerdotes de los hijos de Recab, el hijo de los Recabitas, mencionados por el profeta Jeremías, gritaba diciendo: “Cesa, ¿qué haces? El justo ora por ti”. Y uno de ellos, que era batanero, tomó el madero con el que golpeaba la ropa y golpeó al hombre justo en la cabeza. Y así sufrió el martirio. Y lo sepultaron allí mismo, junto al templo, y su monumento todavía permanece junto al templo. (Eusebio, Historia eclesiástica, citando a Hegesipo, 2.23.4,10-18).
Ocho años después (en el 70 d.C) cuando los Romanos destruyeron el templo, los discípulos huyeron a Pella. Después de esto, los Nazarenos ya no estaban conectados a la casa de Judá a través del servicio del Templo, pero aún podían entrar en las sinagogas, hasta el momento en cuando se estableció el “Birkhat HaMinim”, alrededor del 80-90 d.C. El Birkhat HaMinim es una maldición para los creyentes en Yeshúa. Originalmente fue escrito para los Nazarenos y para todas las demás sectas similares (minim), pero el lenguaje se cambió más tarde para ser denominados los calumniadores (l’malshinim). Sin embargo, la intención de maldecir a los creyentes en Yeshúa es muy clara. Esta maldición se pronuncia tres veces al día por los Judíos ortodoxos practicantes, como el Artículo 12 de la Amidá (las Oraciones Permanentes). Leamos primero la versión modificada (para calumniadores).
Amidá ortodoxa (Oración permanente) Bendición 12
12 Y para los calumniadores [l’malshinim], que no haya esperanza, y que todos los malvados en un instante sean destruidos y que todos tus enemigos sean eliminados rápidamente; y los malvados se desarraiguen, rompan, destruyan y humillen pronto en nuestros días. Bienaventurado eres, Adonai, quien derriba a los enemigos y humilla a los pecadores.
En Berajot 28b-29a, el Talmud de Babilonia afirma que, en su forma original, las Birkhat HaMinim no se referían a los l’malshinim (calumniadores) sino a los l’minim (las sectas, y especialmente a los Nazarenos). (Los números están en las notas al pie).
Tratado 28b: ¿Estas dieciocho [bendiciones] son realmente diecinueve? R. Levi dijo: La bendición relacionada con el Minim 18 se instituyó en Jabneh. 19 ¿A qué debía corresponder? R. Levi dijo: Sobre la opinión de R. Hillel, el hijo de R. Samuel b. Nahmani, 20 al trueno del Dios de la gloria; 21 en la opinión de R. Joseph, a la palabra Uno en el Shemá; 22 en la opinión de R. Tanhum citando a R. Joshua b. Levi, a las pequeñas vértebras en la columna vertebral.
Nuestros rabinos enseñaron: Simeón ha-Pakuli 23 organizó las dieciocho bendiciones en orden antes que Rabban Gamaliel en Jabneh. 24 Dijo Rabban Gamaliel a los sabios: ¿Puede alguno de ustedes enmarcar una bendición relacionada con el Minim? 25 Samuel el Menor se levantó y la compuso. 26 Al año siguiente lo olvidó.
Tratado 29a: y trató de recordarlo durante dos o tres horas, y no lo eliminaron. 1 ¿Por qué no lo eliminaron al ver que Rab Judá ha dicho en nombre de Rab: si un lector cometió un error en alguna de las otras bendiciones, no lo eliminará, pero si en la bendición del Minim, es eliminado porque sospechamos que es un Min?
(Talmud de Babilonia, Berajot 28b-29a).
Después de la destrucción del templo, los Nazarenos ya no estaban atados al Judaísmo a través del servicio en el templo. Después de eso, los Birkhat HaMinim efectivamente abrieron una brecha entre cualquiera que creyera en Yeshúa y el resto del Judaísmo. Desde ese momento en adelante, la fe en Yeshúa se divorció del Judaísmo y se vinculó principalmente a la casa de Efraim, por los cuales Yeshúa dijo que había sido enviado.
Mattityahu (Mateo) 15:24
24 Pero Él respondió y dijo: “No fui enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel”.
Entonces aquellos que pertenecen a la casa de Israel, que quieran practicar el Judaísmo Melquisedeciano de Yeshúa, deben rezar el Amidá, omitiendo la Bendición 12. Y si eso significa que no seremos bienvenidos en una sinagoga, entonces nuestra alternativa es levantar nuestras propias asambleas. Y la forma de hacer esto, y la estructura organizativa tanto interna como entre distintas asambleas, es el tema del próximo capítulo. Lo que veremos es que si todos hacemos nuestra parte para andar como Yeshúa anduvo y hacer de esto una disciplina en nuestras vidas, no solo evitará que caigamos en las corrupciones del Judaísmo rabínico y de la iglesia Cristiana, sino que también sanará a nuestra nación y traerá la reconciliación con Elohim.